Isabel (TVE1, 2012 - 2014)

A falta de ver el último capítulo emitido por TVE1, estoy con Lorena: esta tercera temporada es, sin duda, la mejor: el ritmo de las tramas, los nuevos personajes, la ambientación, los exteriores, los interiores incluso (ya no se notan tan de cartón piedra)...

Me chirría que los hijos de los Reyes Católicos crezcan y se hagan adolescentes e Isabel siga con su lozanía. ¿Acaso los maquilladores no pueden ponerle más arrugas? ¡que se ve que debajo de todas esas capas de ropa sigue habiendo una actriz joven y delgada!. No han tenido mucho tino en envejecerla, la verdad, pues apenas se nota. Fernando sin embargo sí que se le ve mucho más suelto en su papel, más protagonista, mucho mejor.

El rey franco, Carlos VIII, a mí me hace mucha gracia. Esa nariz aguileña es muy francesa y el actor lo hace bien. En mi opinión, hubiera intentado que el acento fuera francés, no tan español, pero bueno... eso ya es ser muy purista.

Me he perdido los dos últimos capítulos, pero a día de hoy me está encantando la trama. Y me gusta mucho la actriz que interpreta a Juana, aunque a veces no llore todo lo creíble que me gustaría. La duda que me asalta es el grado de verosimilitud de las escenas hogareñas, las relaciones personales,¿sabéis si cuentan con información veraz? Porque la actividad pública y etiqueta de la corte sí ha quedado recogida en las crónicas.
Me he quedado con ganas de saber más de los reyes de Francia, sobre todo de Anne de Bretagna, un personaje muy interesante y del que no sabía nada(primero por ser historia de Francia y segundo por ser mujer )

Yo voy a ver si veo antes de esta noche el capítulo pasado para enlazarlo con el que emiten hoy. ¡Es lo que tiene que lo pongan tan tarde y termine casi a medianoche! que una se muere de sueño y tiene que dejar su visionado para otro día.

A mí me sigue pareciendo esta tercera y última temporada la mejor de todas, quizá por la trama, quizá porque es la historia que más conocemos, quizá porque el vestuario y la ambientación están mejor, quizá porque los actores ya han cogido tablas e interpretan más creíblemente. Me gusta mucho el personaje de Juana la Loca (Irene Escolar se nota que lleva la sangre de los Gutiérrez Caba en las venas) y de Felipe el Hermoso (aunque el personaje es terriblemente ingrato, ¡qué hombre tan abominable es!). También la incorporación de Eusebio Poncela y de Fernando Guillén Cuervo y el cambio de modas que definen tan bien las cortes flamenca y española le ha dado más potencial a la serie.

Por cierto, para quien no esté enterado de ello y tras el éxito de audiencia y de premios que está recibiendo "Isabel", TVE está preparando la continuación con la figura del emperador Carlos V (de hecho no tienen muy claro si ponerle de título "Carlos V" o "Carlos I de España") para poder desarrollar hasta el final lo que pasa con Fernando de Aragón, con Felipe el Hermoso o con los hijos de los Reyes Católicos una vez muere Isabel.

Este lunes ya emiten el último capítulo de "Isabel" y yo estoy enganchadísima. ¡La de historia que se nos queda pendiente!. ¿Qué pasa cuando muere la reina? Sí, todos sabemos que luego llega Carlos I pero la transición debió de ser muy dura para el pueblo castellano. ¡Y hay tantos personajes tan queridos en la corte! que nos dejan huérfanos al dejarlos en suspenso. ¿No os da penita que se acabe una serie que ha ido creciendo en cada temporada?

Bueno. Se acabó. Definitivamente esta tercera fue la temporada que más me gustó. Cómo bien dice Áyden, los actores ya tienen más asentados los personajes.
Me encantan las actrices que dan vida a las hijas de los Reyes. El parecido de la que interpreta a Catalina con un retrato de la misma antes de viajar a Inglaterra es asombroso. Y me ha gustado mucho la gravedad y el orgullo con los que interpreta el personaje. Pero definitivamente la que lo borda es Irene Escolar, en las escenas que tiene conjuntas con Michelle le robaba el protagonismo.
Y qué decir del resto de secundarios! El embajador, Fuensalida, una interpretación soberbia de Guillén Cuervo. Fantásticas las escenas con el consejero francés, como se alternaban estos dos personajes en sus gestos de orgullo según ganaban o perdían las batallas los dos países.
Los reyes franceses, Carlos y Luis, muy bien interpretados.
Y por último, la música. Qué delicia. Qué piezas tan acordes con las escenas...
En fin. Una joya de serie. Tras acabar el capítulo vi el anuncio de Águila Roja...pero esta vez no pudo quitarme el buen sabor de boca que me dejó Isabel.
Seguiré comentando cosas, lo que no me gustó. Ahora me reclaman.

Estoy totalmente de acuerdo contigo, querida Lorena. La verdad es que me dio pena que se acabara porque uno se va encariñando con los personajes. ¡Hasta Michelle Jenner que no me gustaba nada en la primera temporada y se me hizo algo creíble en la segunda acabó gustándome en su rol de mayor en esta tercera! Fernando como siempre, soberbio, al igual que esos maravillosos actores que acompañan a los Reyes Católicos como son Eusebio Poncela en su papel del Cardenal Cisneros y Guillén Cuervo como Fuensalida. Esos sí que eran embajadores que vendían bien las Españas y sabían negociar fielmente para beneficiar a su país y no a sus propios bolsillos.

También me han sorprendido y mucho, los actores jóvenes que hacen de hijos de sus majestades. Me gustó mucho María de Portugal (pobre porque no dura mucho) y Catalina (muy bien seleccionada en cuanto a estética de la época y porte) pero sobre todo, Juana de Castilla. ¡Qué actriz es Irene Escolar! LLeva la sangre de los Gutiérrez Caba en las venas. Esa muchacha, frente a su juventud, va a tener un provenir muy prometedor. Me entristeció mucho escucharla decir en una entrevista que no estará en la serie que se va a rodar sobre su hijo, el emperador Carlos I de España. Su personaje, cuando la serie comience, ya está en Tordesillas y será mayor, de manera que han buscado a otra actriz para que encarne su personaje y sea más acorde con la edad que tendrá cuando comience la acción.

Tampoco se queda atrás su esposo, Felipe "el hermoso". Su rostro cuadrado, sus facciones duras, su cabello y sus ojos le confieren un ideal bello para la época si seguimos los retratos que hay de él y de su entorno. Su mujer en la ficción no le hace sombra, pues aunque su papel le confiere un carácter villano, ruin y horrible, lo borda. Me ha gustado mucho especialmente la relación de esta pareja, que humaniza a la loca y nos hace entender que sus problemas dementes venían de muchas circunstancias que la rodearon.

Y es que, en mi opinión, una de las mejores hazañas que ha tenido esta tercera temporada (la mejor, sin duda, como señalaba Lorena), es que ahonda más profundamente en la psicología de los personajes, en el amor que sienten los padres por sus hijos, en el deber de estos por el Estado, en la lealtad de los súbditos, en la profunda religiosidad que lo regía todo, en los problemas de salud con los que reyes y campesinos se enfrentaban... es decir, es una serie cercana al espectador.

La música y la ambientación también han crecido notablemente hasta sobresalir a un primer plano. Si en la primera temporada todo parecía cartón piedra y en la segunda temporada hubo algún fallo (menos que en la primera pero también) de historia (en el viaje de Colón que parte de Cádiz se ve una imagen con la catedral al fondo, ¡catedral que no tendría esa forma hasta el siglo XVIII!) en la tercera no me he percatado de ninguno. Si los hay, desde luego no han llamado la atención.

(Error marcado que explican en TVE sus responsables)  

La banda sonora de esta última temporada se hace más introspectiva, más íntima y religiosa. Tiene un peso sobresaliente en las imágenes y las carga de un valor emocional más grande. La ambientación también me ha resultado más atractiva: más parajes naturales, más decorados, más exteriores, más detalles y sobre todo, una indumentaria que marca ahora las modas de comienzos del siglo XVI, sobre todo las diferencias entre Flandes (con una moda que impuso María de Borgoña y que los pintores flamencos tan bien reflejarán en sus tablas), Francia (esos armiños son muy característicos), Inglaterra (con sus tocados) y España.

Como ya ocurriera con la entrega de las llaves de la ciudad de Granada y su cuadro histórico en la segunda temporada, a los que nos gusta ver reflejados esos momentos pintados nos ha satisfecho encontrar en la muerte de Isabel un guiño al cuadro de Rosales.  



Me enorgullece, finalmente, que en España hayamos aprendido a esforzarnos por la rigurosidad histórica y por hacer programas de calidad. Saber que "Isabel" se ha vendido a Inglaterra para su emisión, a Francia, a Portugal y a otros países europeos es síntoma de su buen hacer, por no decir que también se va a programar en los países latinoamericanos. Es una satisfacción que nuestro producto nacional, sea también internacional.

Y como bien dicen... a rey muerto, rey puesto. Se acaba "Isabel" pero esperamos con impaciencia el reinado de Carlos I.